Madres y padres de adolescente en Estados Unidos están demandando a las empresas de redes sociales por presuntos “daños físicos, mentales o emocionales” que sufren niños y adolescentes al utilizar estas plataformas
Cada vez más aumentan los casos de suicidios entre niños y adolescentes, los padres de los menores aseguran que se debe a la constante exposición a las redes sociales y argumentan que las medidas de protección que ofrecen algunas redes sociales no son funcionales y son insuficientes, por lo que cientos de padres y madres en Estados Unidos preparan una demanda colectiva a estas plataformas.
Kristina Cahak le contó a la BBC News como vio a su hija sumergirse en la depresión debido al uso constante de redes sociales, sin embargo, no supo cómo actuar. Supuestamente su hija se volvió cada vez más “adicta”, abriendo cuentas múltiples en redes como Instagram y Snapchat en las que usaba nombres falsos sin que la familia lo supiera.
Más casos como el de Kristina
Las demandas de las familias afectadas por el impacto de las redes sociales también apuntan a Google, que gestiona YouTube, y a ByteDance, que gestiona TikTok. En ellas alegan que la “crisis de salud mental sin precedentes entre los niños” es alimentada por los productos “defectuosos”, “adictivos” y “peligrosos” que estas empresas desarrollan.
El objetivo las demandas es que las empresas suspendan prácticas identificadas como nocivas y, en muchos casos, piden una indemnización. Pero las empresas no están de acuerdo y rechazan estas acusaciones. Además, aseguran que han implementado y actualizado herramientas y funciones para proteger a niños y adolescentes en sus plataformas.
Pero las familias afectadas afirman que las medidas que tienen dichas redes sociales y plataformas son insuficientes y están mal supervisadas. Incluso el gobierno de Estados Unidos advirtió que las redes podrían tener beneficios, también podrían plantear riesgos para la salud mental de los jóvenes.
La Asociación Estadounidense de Psicología afirma que “el uso de las redes sociales no es inherentemente beneficioso ni perjudicial para los jóvenes”, pero se necesitan más estudios sobre los efectos positivos y negativos de estos servicios. La tecnología ha avanzado tan rápido que aún faltan muchas investigaciones concluyentes del impacto en nuestra vida diaria.
¿Qué impacto pueden tener las redes sociales en la salud mental?
Las redes sociales pueden tener tanto impactos positivos como negativos en la salud mental, dependiendo de cómo se utilicen y de la predisposición individual de cada persona, pueden ayudar a mantener y fortalecer las conexiones sociales, especialmente en personas que de otra manera podrían sentirse aisladas. Son también espacios para expresar emociones y recibir apoyo de amigos, familiares de manera digital.
Pero también suelen tener impactos negativos, como la comparación social, sentimientos de insuficiencia y baja autoestima debido a las “vidas perfectas” de algunos influencers de estas redes. Pueden contribuir al aislamiento real, ya que algunas personas pueden preferir interactuar en línea en lugar de en persona. Las plataformas de redes sociales en ocasiones son utilizadas para el acoso, el ciberbullying y el abuso, lo que puede tener graves repercusiones en la salud mental. El uso excesivo de las redes sociales puede convertirse en una adicción, lo que puede afectar negativamente la salud mental.