Israelíes prendieron fuego dos veces a su perímetro cuando había empleados dentro. “Es inaceptable usar como blancos a los trabajadores humanitarios”: Guterres

António Guterres, secretario general de las Naciones Unidas, expresó este viernes su condena por el ataque perpetrado contra la sede de la Agencia de la ONU para los Refugiados Palestinos (UNRWA) en Jerusalén.

Afirmó que es “inaceptable usar como blancos a los trabajadores humanitarios y sus posesiones”.

La sede de la UNRWA en Jerusalén este ocupado permaneció cerrada este viernes, luego de que el jueves residentes israelíes incendiaran su perímetro en dos ocasiones, mientras había empleados de la agencia y de otros organismos de Naciones Unidas presentes en su interior.

En otro mensaje posterior, Guterres pidió a Israel y Hamás “mostrar su coraje y no escatimar esfuerzos para llegar a un acuerdo que termine con el derramamiento de sangre y libere a los rehenes”.

Añadió -como ya ha hecho repetidamente en los últimos días- que un asalto a Rafah a gran escala “conducirá a un desastre humanitario de proporciones épicas”.

Y concluyó pidiendo a la comunidad internacional que “hable con una sola voz” para lograr un alto el fuego humanitario en Gaza.

Aunque no citó a ningún país en concreto, la petición de alto el fuego ha sido vetada en varias ocasiones en el Consejo de Seguridad por EU, y aun en el único caso en que no se vetó, el pasado 25 de marzo, Israel hizo oídos sordos.

Reprobación enérgica europea
Por su parte, el alto representante de la Unión Europea (UE) para Asuntos Exteriores, Josep Borrell, aseguró que el club comunitario “condena enérgicamente” el ataque contra la sede de la UNRWA en Jerusalén este, y dijo que los responsables de lo sucedido deben rendir cuentas.

“La UE condena enérgicamente el ataque contra las instalaciones de la UNRWA en Jerusalén este. Los perpetradores deben rendir cuentas”, escribió el político español en su perfil de la red social X.

Agregó que es responsabilidad de Israel “garantizar la seguridad de los trabajadores humanitarios”, y subrayó que la UNRWA es “un salvavidas irreemplazable para millones en Gaza y la región”.

El comisionado general de esa agencia, Philippe Lazzarini, informó que “a la luz de este segundo incidente atroz en menos de una semana, he tomado la decisión de cerrar nuestro complejo hasta que se restablezca la seguridad adecuada”.

Aunque no hubo víctimas entre nuestro personal, el incendio causó grandes daños en las áreas exteriores y supuso un grave riesgo para su personal, ya que la sede de la UNRWA tiene en ese terreno una estación de gasolina y diésel para su flota de automóviles.

Lazzarini explicó que el director de la sede y otros empleados tuvieron que apagar el fuego ellos mismos, ya que los extintores israelíes y la policía tardaron en aparecer.

“Se vio a una multitud acompañada por hombres armados afuera del complejo cantando ‘Quemen las Naciones Unidas'”, indicó Lazzarini sobre los autores de la agresión, escenas que también se han difundido en las redes sociales.

El comisario europeo de Gestión de Crisis, Janez Lenarcic, ya condenó el jueves en X el ataque contra la UNRWA en Jerusalén y pidió a las autoridades israelíes garantizar la seguridad del personal y de las instalaciones de Naciones Unidas, así como procesar a los responsables de lo ocurrido.